Enfermarse por bacterias Cronobacter no es algo que ocurra con frecuencia, pero en los bebés estas infecciones pueden ser mortales, por lo que, en el Blog de esta semana, hablaremos sobre el tema.
Las infecciones por Cronobacter en los bebés de menos de 12 meses a menudo se vinculan a la fórmula infantil en polvo. Si le da fórmula infantil en polvo a su bebé, puede tomar medidas para protegerlo para que no se enferme.
El Cronobacter sakazakii es una bacteria que se encuentra de forma natural en el medioambiente.
Estas bacterias pueden vivir en los alimentos secos, por ejemplo:
Fórmula infantil en polvo
Leche en polvo
Tés de hierbas
Almidones
Enfermedad rara pero grave en los bebés
Aunque las infecciones por Cronobacter son raras, pueden ser mortales en los bebés recién nacidos. Estas infecciones en los bebés suelen ocurrir en los primeros días o las primeras semanas de vida.
Las bacterias Cronobacter pueden causar una infección peligrosa de la sangre (septicemia). También pueden provocar la inflamación del recubrimiento alrededor del cerebro y la médula espinal (meningitis).
Los bebés con más probabilidades de enfermarse incluyen:
Bebés de 2 meses y menores. Estos bebés tienen más probabilidades de presentar meningitis si se enferman por Cronobacter.
Bebés nacidos prematuramente.
Bebés con el sistema inmunitario debilitado. Los bebés con esta afección no pueden luchar contra los microbios con la misma eficacia que los demás debido a una enfermedad o tratamiento médico, como la quimioterapia para el cáncer.
En los bebés la enfermedad por Cronobacter generalmente comienza con fiebre y dificultad para alimentarse, llanto excesivo o muy bajos niveles de energía. Algunos bebés podrían incluso tener convulsiones. Debe llevar a un bebé con estos síntomas a un proveedor médico lo antes posible.
Cinco directrices para proteger a su bebé del Cronobacter
1. Amamante si puede. Amamantar a su bebé es una de las mejores cosas que puede hacer para la salud y el desarrollo de su hijo. Los funcionarios de salud y los proveedores médicos notifican muy pocos casos de infección por Cronobacter en los bebés alimentados solamente con leche materna.
2. Limpie, desinfecte y guarde de manera segura los artículos tales como los biberones y las partes del extractor de leche. Ayude a prevenir que los microbios se multipliquen en estos artículos y mantenga segura la leche del bebé. Puede hacerlo al limpiar, desinfectar y guardar los biberones y las partes del extractor de leche con cuidado. Después de usar los biberones y el equipo de extracción de leche, separe sus partes o desármelos para limpiarlos completamente.
3. ¡Mantenga las manos limpias! Siempre lávese las manos con agua y jabón por al menos 20 segundos en los momentos clave:
Antes de preparar y darle el biberón u otros alimentos al bebé.
Antes de tocarle la boca al bebé.
Antes de tocar el chupete u otros objetos se pongan en la boca del bebé.
Después de ir al baño o cambiar pañales.
4. Si alimenta a su bebé con fórmula, considere usar una fórmula líquida cuando sea posible. La fórmula infantil en polvo no es estéril y podría contener microbios. El uso de fórmula líquida en lugar de fórmula en polvo es particularmente importante si el bebé:
tiene menos de 2 meses de vida;
nació prematuramente, o
tiene el sistema inmunitario debilitado.
La fórmula infantil líquida se produce de manera que sea estéril (sin microbios). La fórmula infantil líquida no debería enfermar a su bebé con una infección por Cronobacter si sigue las instrucciones del envase.
5. Prepare y almacene la fórmula infantil en polvo de manera segura. Asegúrese de que la fórmula no esté vencida o retirada del mercado. El envase debería estar en buenas condiciones sin abolladuras, bordes hinchados o manchas de oxidación. Mantenga limpias las tapas de la fórmula y las cucharitas medidoras. Cierre el envase de la fórmula lo antes posible. En la mayoría de los casos, es seguro mezclar la fórmula infantil en polvo siguiendo las indicaciones del fabricante que aparecen en el envase.
Pero si su bebé podría estar en mayor riesgo, considere tomar estas medidas adicionales para preparar la fórmula en polvo con agua caliente (a una temperatura de al menos 70 °C):
Limpie las superficies de trabajo, como los mesones y lavaplatos o lavamanos, con agua y jabón o use una toallita húmeda desinfectante o una toallita de papel humedecida con un producto de limpieza. No coloque los artículos de alimentación directamente en el lavaplatos o lavamanos porque los microbios que se encuentran en ellos o en el drenaje podrían contaminar estos artículos.
Lávese las manos con agua y jabón antes de preparar la fórmula infantil.
Hierva el agua y déjela enfriar durante unos 5 minutos.
Vierta el agua en un biberón o en una taza con tapa que estén limpios.
Añada la cantidad exacta de fórmula que diga en el envase.
Sacuda cuidadosamente el biberón con la tapa puesta o la taza con la tapa puesta, en lugar de revolver la fórmula.
Si planea usar la fórmula preparada de inmediato, enfríela hasta que alcance a la temperatura del cuerpo para asegurarse de que no esté demasiado caliente antes de dársela al bebé. Para ello, ponga el biberón ya preparado y con tapa bajo agua corriente fría o dentro de un recipiente con agua y hielo. No permita que el agua fría entre en el biberón o toque la tetina.
Antes de alimentar al bebé, pruebe la temperatura de la fórmula dejando caer unas gotas en el lado interno de su muñeca. Debe sentirla tibia, no caliente.
Referencias:
CDS (09/06/2022) La infección por Cronobacter y los bebés, extraído de: https://www.cdc.gov/cronobacter/es/infection-and-infants-es.html
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